Regalo de cumpleaños para ti

 Te

Hola Audrey. Hoy es tu cumpleaños y tengo un regalo para ti. Simbólico, como no puede ser de otra manera, pero seguro que te gustará. Son las imágenes de tu rostro, de la complicidad de la mirada de tus ojos, de tú sonrisa. Son fotogramas de  distintos momentos y etapas de la vida que conocimos de ti, la que nos regalaste desde la generosidad de tu corazón. 

¿Sabes...? Anoche volví al ver "Vacaciones en Roma" tu primer éxito de cine. Al parecer, William Wyler te eligió como protagonista, descartando a Elizabeth Taylor y diciendo que no había visto nunca una combinación de encanto, naturalidad y talento interpretativo. Te recuerdo que quedó impresionado por la perfecta conexión que tuvisteis Gregory Peck y tú, tanto que se dijo que hubo un romance entre los dos. Luego, tú lo desmentiste diciendo "Si vas a interpretar un romance tienes que intentar sentirlo". Aunque también dijiste: "Bueno... junto a Gregory me sentí en una nube... Lo que pasó es que no dejamos que sucediera..."

Y recordarte hoy también lo que escribí ya en otra ocasión: "La naturalidad de su belleza, su elegancia femenina y la transparencia de su personalidad la convirtieron en un símbolo de la moda, pero también de la sencillez. Y así, la actriz fue considerada como la actriz más cercana y querida del mundo en el cine. Nadie como ella gozó tanto de la amistad de sus compañeros de rodaje."

En la imagen "Audrey, entusiasmada en su lectura, buscando el libro perdido, para hallar la clave de su reconciliación".

Es todo en este aniversario tuyo. Te dejo estos versos que ya te dediqué hace años y el vídeo de tus imágenes (hacer clic) que te he preparado para esta feliz ocasión.. 

"No temas volar sobre el viento,

ni dejes pintar sobre azul

la esencia y sabor de tus sueños'.

Un abrazo, Audrey.

Ángel González. "Rusty Andecor"

Tributo a Audrey Hepburn en "blanco y negro´´

Representativa imagen de Audrey, Hepburn.
en blanco y negro, en "Vacaciones en Roma",
"Sabrina" y "Ariadne"

Hoy se cumplen 31 años del fallecimiento de nuestra querida Audrey. Nunca debió de irse. Sin embargo todos nos vamos, como se van también las personas buenas y maravillosas, como ella. Lo cierto es que, desde hace muchos años, suelo escribirle una carta en estas fechas o para conmemorar su nacimiento;  cartas que le envío a su lugar, allá en la eternidad. Esta vez no lo haré; no sé si porque estoy más nostálgico con su recuerdo, o quizá porque prefiero escribirla en otro momento en que me sienta más inspirado.

Precisamente, esa fue una de las virtudes más extraordinarias de Audrey. El prodigio de transmitirnos la inspiración para recrear algunos de los más reservados escenarios en la dimensión de nuestros sueños. No sólo la fascinación de sus ojos almendrados y color “otoño”, su mirada transparente y sincera, sino la belleza cándida y dulce de su rostro, toda su armonía etérea y sugerente, para llevarnos a la puerta de la entrada de su corazón. Pues ella misma decía: “La belleza de una mujer debe verse en sus ojos porque es la puerta de entrada de su corazón”. 

Elegancia y belleza. Clase y discreción. Candidez y dulzura.
Nadie como Audrey Hepburn supo reflejar ese destello.

Son casi 50 años, desde que se estrenó su última gran película en las pantallas comerciales. Sin embargo, su rostro ha perdurado en la memoria de muchos de quienes la vimos en el cine y en la galería de todas sus fotos. Durante todos estos años, sus ojos marrones, estilo "bambi", transmitieron cariño y ternura, a quienes la hemos contemplado.

Por lo demás, siempre tuvimos esa imagen personal tan calidamente carismática  y "suya", delicada y respetuosa con el mundo. Nunca se enfadaba con con quienes trataba. Jamás llegaba tarde a sus compromisos y era meticulosa con los detalles. Sobre todo, se comportaba en su trabajo de forma muy profesional. Y algo por lo que se le admiró; nunca se comportó como una diva, ni como una estrella. Solo se preocupaba por ser una buena actriz.

El vídeo titulado "Tributo a Audrey Hepburn en blanco y nogrd" (Clic en el título), el que dejamos aquí en su "Blog de Audrey Hepburn", es un tributo de gratitud y admiración a su personalidad, tanto como ser humano, como a su carrera artística y profesional r el perfil des Editado con imágenes en "blanco y negro", para realzar el perfil de sus personajes en ese formato del viejo y clásico celuloide.

Finalmente, Audrey, decirte aquello que se dijo una vez de ti: "Dios estará contento de tener un ángel como tú y con Él". 

Ángel González "Rusty Andeco"